El Tren Interurbano México-Toluca es un proyecto de infraestructura de transporte en México que busca conectar la Ciudad de México con Toluca, la capital del Estado de México. Este proyecto tiene como objetivo mejorar la movilidad y la conectividad entre ambas ciudades, reducir la congestión del tráfico en las carreteras y ofrecer a los pasajeros una forma más rápida y eficiente de desplazarse entre estos dos importantes centros urbanos.
La línea del tren interurbano se extiende desde la Terminal de Observatorio en la Ciudad de México hasta Zinacantepec en Toluca. La ruta tiene una longitud de aproximadamente 57 kilómetros.
Este tren está diseñado para alcanzar velocidades significativamente más altas que los trenes de cercanías tradicionales, lo que permite un tiempo de viaje más corto entre las dos ciudades. A lo largo de la ruta, el tren interurbano cuenta con varias estaciones intermedias, incluyendo Santa Fe y Lerma, entre otras.
El proyecto tiene como objetivo reducir la congestión del tráfico en carreteras clave, disminuir la contaminación del aire y mejorar la calidad de vida de los residentes al proporcionar una opción de transporte público más eficiente y amigable con el medio ambiente.
