Una demostración militar sin precedentes
Con motivo del octogésimo aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, más de 10 000 miembros del ejército desfilaron por la Plaza de Tiananmén en Pekín. El mandatario Xi Jinping proclamó que el país es imparable en su desarrollo nacional, mientras avanzaban misiles hipersónicos antibuque, armamento antiaéreo sofisticado y otros equipos de alta tecnología.
Tecnología militar avanzada al frente
La exhibición incluyó un despliegue masivo de armamento puntero: misiles hipersónicos antibuque, lanzadores intercontinentales con cabezas nucleares y sistemas de defensa aérea, símbolos de la modernización acelerada de la Fuerza Armada del país.
Un mensaje de unidad en la escena internacional
Al cierre del desfile, se liberaron 80 000 palomas y globos en un gesto simbólico de paz. No estuvo presente ningún líder occidental; en cambio, la ausencia subrayó el enfoque de China en enfatizar su narrativa propia en la historia global.
¿Qué significa esta exhibición para el futuro?
Más que un acto conmemorativo, el desfile es una declaración de poder y determinación. Xi posicionó la reactivación nacional como imparable, reforzando el lugar de China como protagonista en la escena mundial contemporánea.