El Sol sorprendió este jueves con una espectacular erupción, emitiendo una fuerte llamarada solar de la clase X, la categoría más poderosa conocida. Captada por el telescopio espacial de la NASA, Solar Dynamics Observatory, esta erupción, clasificada como X6.3, marca un hito en el actual ciclo solar, siendo la más intensa desde 2017, cuando una llamarada alcanzó la clase X8.2. Los ciclos solares, con una duración promedio de 11 años, comenzaron el último en 2019.

Aunque las erupciones solares no pueden atravesar la atmósfera terrestre y dañar físicamente a los humanos, la NASA advierte sobre posibles interrupciones en las comunicaciones por radio de alta frecuencia, así como cortes de electricidad. Estos eventos son poderosos estallidos de radiación solar, y sus efectos pueden afectar significativamente la tecnología y las infraestructuras terrestres.

En los últimos días, se han registrado otras dos potentes llamaradas, una clasificada como X1.8 el miércoles y otra como X1.7 el jueves. La NASA ha compartido un GIF que muestra la repentina explosión de energía solar, subrayando la importancia de monitorear de cerca estos fenómenos y sus posibles repercusiones en nuestro planeta.