El horror se hizo presente en la carretera que conecta Chihuahua con Ciudad Juárez, en la frontera norte de México, cuando las autoridades descubrieron una escalofriante escena este domingo. Ocho cuerpos, con claras señales de tortura, fueron encontrados apilados, desnudos y atados de pies y manos con cinta adhesiva cristalina en el kilómetro 37 de la mencionada carretera, cercana a Chihuahua y fronteriza con la ciudad estadounidense de El Paso, Texas.
Según los informes preliminares, todas las víctimas eran hombres y presentaban heridas de bala. Algunos de ellos tenían partes de sus extremidades envueltas en plástico y, de manera aún más perturbadora, uno de los cuerpos sostenía un mensaje a través de un cuchillo.
La Fiscalía de Distrito Zona Centro ha confirmado estos detalles macabros, agregando más sombras a esta tragedia que refleja la violencia desenfrenada que azota la región fronteriza. Este espantoso hallazgo subraya la urgente necesidad de abordar la creciente violencia y criminalidad en México, así como en otras regiones afectadas por el crimen organizado.
